La fuerza interior de un hombre reside en sus ideales
El 25 de abril de 2005 Vicente Fox se detuvo frente a un joven de 18 años, que había escrito en una cartulina Fox traidor a la democracia y que la mostró al paso del presidente. Raúl Alberto Sánchez en aquella fecha era estudiante del primer año en la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca.
Entonces Fox lo interrogó:
_¿Por qué dices que soy un traidor a la democracia?
A lo que el joven respondió:
_No nos hagamos tontos, señor. Es por el asunto del desafuero (de López Obrador).
Fox le replicó:
_¿Crees que yo lo planeé?
El joven:
_Sí, es obvio.
Fox:
_¿Crees que yo puedo controlar al Congreso?
_Usted solo, no.
Fox:
_Anda, no tengas miedo, nadie te va a hacer nada, aquí se respeta la libertad de expresión. Y yo no soy un traidor a la democracia.
Después de este encuentro el muchacho nervioso y emocionado al mismo tiempo escribió al reverso de su cartulina:
Hoy me he demostrado a mí mismo y a los demás a defender una idea, a defender el libre pensamiento, a tomar el valor suficiente para defender mis ideales. A que el ser humano es un ser que razona y que no se le puede engañar; porque siempre demostrará su gallardía y coraje contra cualquier injusticia y represión. La fuerza interior de un hombre reside en sus ideales.
Publicado en Proceso No. 1487 de 2005
Se trató de cinco minutos que cambiaron la historia o le dieron un empujoncito, y que significaron la rendición del gobierno de Fox a la canalla del desafuero y que tuvieran que resignarse a enfrentar a Andrés Manuel López Obrador en las urnas... y ya sabemos lo que pasó en 2006.
¡Vamos AMLO 2012!
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