Hace poco Alejandro Martí afirmaba que, en su opinión, el gobierno "es parte del problema de la inseguridad en México". Y, sin embargo (para ser congruente con su dolor), no ha llamado a los ciudadanos a rechazar electoralmente a quienes han tenido en sus manos la "seguridad" de éste país en los últimos dos sexenios.
Desde hace nueve años es el PAN el primer responsable a nivel federal de garantizarle al pueblo la tranquilidad y el bienestar a que tiene derecho pero que ha demostrado en los hechos una total ineficacia.
O no pueden o no quieren o las dos cosas juntas.
A muchos gobernantes (no me atrevo a decir que todos), les falta valor para comprometerse a respetar verdaderamente (no a través de una firma en un papel que les redituará en las urnas), la vida y la dignidad de los mexicanos.
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